Solomia comenzó a cantar el clásico de la ópera ‘Tiempo de Decir Adiós’ y se escuchó la voz de un ángel. Su actuación fue tan hermosa que la juez Lena no podía dejar de llorar. Y no está sola. GUAU ¡Qué voz!
El Señor Jesucristo rodea a todos los creyentes con su presencia (Sal. 119:151). Cuando usted tiene un pensamiento, el Señor está cerca para leerlo; cuando usted ora, el Señor está cerca para oír la oración; cuando necesita su fortaleza y su poder, Él está cerca para darlos.