Doug el perrito sale a las calles para difundir mensajes de inspiración y aliento. Su simple acto de bondad ayudó a alegrar los días de muchos desconocidos. ¡Qué manera positiva de empezar el año!
Si puso tanto cuidado en cada uno de nosotros, y si aún los detalles que parecen insignificantes para nosotros, Dios los conoce y no pasa nada por desapercibido, ¿por qué creer que no le importamos o que tiene cosas más importantes que atender?