Aunque erais esclavos del pecado, habéis obedecido de corazón a aquella forma de doctrina a la cual fuisteis entregados.
Romanos 6:17
Si yo fuera a definir la vida cristiana con una palabra, escogería la palabra obediencia. La obediencia, el poder, la bendición y el gozo son elementos esenciales de la vida cristiana. Sin la obediencia, no habrá poder, bendición ni gozo en nuestra vida.
Una distinción fundamental entre un cristiano verdadero y alguien que simplemente dice que es cristiano es un sincero deseo de obedecer a Dios. Para el cristiano, obediencia es una palabra agradable, prometedora y alentadora. Debe ser una expresión agradable del más profundo deseo de su corazón. Si está dispuesto a obedecer a Dios, y su deseo de hacerlo es resultado del amor y no del temor, ese es un buen indicio de que usted es un verdadero hijo de Dios.